Santiago de los Caballeros.- Oscar de la Renta ha sido estudiado con frecuencia desde la perspectiva internacional. En esta oportunidad, la Fundación Eduardo León Jimenes, Centro León y Grupo Puntacana presentan la vida y obra de un artista fuera de serie, de un creador polifacético, de un dominicano universal que siempre mantuvo a su país natal en su mente y en su generoso corazón. El sueño se inicia cuando, corriendo el verano de 2012, María Amalia León de Jorge y Rosanna Rivera se encontraron con Oscar en la ciudad de Nueva York, y juntos comienzan a tejer la idea de la exposición a partir de las visiones que el propio diseñador tenía de la misma. En 2015 se retoma la iniciativa al iniciarse la investigación curatorial con el impulso entusiasta de la familia Rainieri y, muy especialmente, de la familia Oscar de la Renta.
La exposición es una perspectiva de su figura, vista desde República Dominicana, su cultura natal, identificando las diversas conexiones de sus raíces caribeñas con otros territorios que el diseñador fue trenzando a lo largo de su vida y carrera. En este proyecto expositivo se muestra en la obra del diseñador el vínculo entre lo nacional y lo universal, lo dominicano y lo caribeño resultando un aporte inédito y singular en el panorama expositivo, tanto nacional como internacional. Los espacios de la institución cultural invitan a un recorrido a través de la trayectoria, creatividad e influencia de este creador de fama mundial, a partir un relato museográfico que contiene los fundamentos de una personalidad excepcional, llena de arte, rigor y ternura.
Este proyecto expositivo, enmarcado en el programa Grandes Maestros, que el Centro León ha venido desarrollando desde sus inicios, ha contado además con el respaldo material y moral de destacadas empresas interesadas en la promoción del arte y la cultura. Grupo Puntacana, Cervecería Nacional Dominicana, Citi Private Bank, Banco Popular Dominicano, Editora Listín Diario, Visa Internacional, Aeropuerto Internacional del Cibao, Synergies Corporation, Fundación Propagás y Excel, son los patrocinadores. Lo que se exhibe hoy en sala es el resultado de un proceso de varios años de trabajo, ¿cuáles fueron las etapas de este proyecto? Joel Butler: La idea de realizar esta exposición germinó con una visita de Oscar de la Renta al Centro León en el año 2009, cuando se presentó la exposición Fernando Peña Defilló, el eterno retorno. Y empezó a tomar forma tras una visita de nuestra directora María Amalia León de Jorge a Oscar en ese mismo año. En el año 2015 se inició formalmente el proceso de investigación en el que se identificaron las colecciones, fondos bibliográficos y documentales a partir de los cuales se conceptualizó esta exposición que muestra además de una larga e intensa labor en el mundo de la moda, la labor como embajador de la cultura dominicana que él mismo se atribuyó, así como su lado humano y humanitario. Una vez identificados los trajes, obras, documentos y objetos necesarios para narrar la historia de la exposición, se inicia el proceso de contactar con las instituciones y coleccionistas privados y coordinar los convenios y las logísticas de transporte hasta el Centro León. Tras la llegada de todos objetos al depósito de bienes culturales del Centro León, el proceso de instalación de los trajes y accesorios ha estado a cargo de Molly Sorkin y Jennifer Park, especialistas del Archivo Oscar de la Renta y curadoras expertas en moda y textiles. El diseño museográfico y el montaje de la exposición ha estado a cargo del equipo de especialistas del Centro León, liderado por nuestra museógrafa Leticia Moronta con asesoría de Donovan & Green y Martín Corullon.
¿Cómo fue el proceso de investigación para el proyecto expositivo? ¿Qué fondos documentales se estudiaron? ¿Qué personas aportaron información o prestaron objetos y cómo estos aportes se reflejan en la sala? Joel Butler: Como parte de la investigación se realizaron más de 50 entrevistas que incluyen a familiares, compañeros de estudios y amigos de la adolescencia del diseñador. También contamos con los testimonios de personalidades nacionales e internacionales que fueron clientes y amigos de Oscar de la Renta, a los que se suman los de personas que trabajaron a su lado tanto en moda como en sus otros proyectos. Durante el proceso de investigación se realizaron varios viajes para estudiar en detalle los fondos de instituciones como el Savanah College of Arts and Design, Kent State University Museum y el departamento de colecciones especiales del Fashion Institute of Technology, así como otras colecciones que se consultaron por vías digitales como la colección del Anna Wintour Costume Institute, el Museo del Traje de Madrid, entre otros.
El nombre de la exposición es SER OSCAR DE LA RENTA, ¿por qué “SER” en infinitivo? Sara Hermann: Una de las tareas más difíciles es titular algo. Y una exposición es bastante compleja de nombrar, y si a eso le sumamos la complejidad de esta, reconozco que ha sido una labor intensa de un equipo de trabajo. Como decía Oscar, el proceso creativo es el trabajo en equipo. Así, nos planteamos Ser Oscar de la Renta. Ser es el más general de los términos. En verbo y en infinitivo implica más que la presencia material de una persona, plantea una presencia espiritual. Ser Oscar de la Renta es ser humano, ser dominicano, ser transnacional, ser íntegro, ser familiar, ser amigo.
Puede decirse que la labor de la curaduría es lograr una intermediación entre un artista y su obra con el público. En esta oportunidad, ¿cómo el equipo curatorial logra establecer este puente comunicacional entre la vida y obra de Oscar de la Renta y el público? Sara Hermann: Este proyecto expositivo propone un recorrido a través de la vida, labor e influencia de Oscar de la Renta, un relato visual y espacial que lleva a los visitantes desde lo ampliamente conocido, hasta espacios y momentos más íntimos. Para el equipo curatorial fue de suma importancia realizar este proyecto en la República Dominicana para presentar una visión diferenciada de la figura de Oscar de la Renta estudiada desde su tierra natal e identificando las diversas conexiones con otros territorios que el diseñador fue trenzando a lo largo de su vida y carrera. Los puentes comunicacionales desde estas dimensiones de Oscar y los públicos se establecieron partiendo de una investigación exhaustiva. El proceso de investigación de cualquier proyecto expositivo implica una serie de complejidades, variados niveles de enjundia, involucra tiempo y especialistas que se aboquen a esta tarea. Ser Oscar de la Renta no ha sido diferente, aunque ha tenido una serie de especificidades relativas a los temas que estamos tratando.
¿Cuáles fueron los principales elementos que definieron la curaduría de esta exposición? Sara Hermann: La moda, como elemento discursivo, como componente cultural, es un tema rico y con posibilidades de abordarlo de variadas formas, es a su vez una cantera de investigación muy particular. Y si a ese hecho se le suma la pluralidad del personaje Oscar de la Renta, entonces como consecuencia, hay también múltiples dimensiones investigativas que teníamos que abordar. También, este proceso de investigación implica un equipo de trabajo. Es un esfuerzo colectivo y que se ha desarrollado en lugares y momentos diferentes. Las fuentes han sido variadas, museos, instituciones académicas, archivos. El equipo ha incluido personas de diferentes antecedentes y formaciones, y ha abarcado muchas voluntades. Preguntas que quizás no nos la habíamos hecho antes, han jugado un papel fundamental: ¿Qué implica el proceso de diseño? ¿Para qué se diseña? ¿Qué habilidades o capacidades entran en juego al momento de diseñar? ¿Cómo el diseño articula nociones de identidad, cultura, ser y modos de vida?
El recorrido por la exposición se hace a través de cinco momentos espaciales o ámbitos ¿cuáles son y cómo se articulan entre sí? Yina Jiménez: Las distintas dimensiones de Oscar de la Renta se podrán apreciar en la exposición a través de cinco momentos espaciales que compendian y articulan su devenir como ser humano y como profesional de las artes. La categoría momento espacial comprende, en un concepto compuesto, la idea de tiempo y espacio. Es un núcleo de sentido que presenta episodios cronológicos (no necesariamente lineales) y re-semantiza la idea de espacio relacionando el sitio de la exposición con el lugar al que se alude. Los cinco momentos son: Oscar manifiesto; Oscar Renta Fiallo es Oscar de la Renta; En el taller todo es inspiración; I’m just an island boy: Oscar es transnacional; y Esencias de un legado: Ser Oscar de la Renta. Los momentos espaciales se articulan entre ellos a través del taller, cuyos muros perimetrales hacen énfasis en tres ejes geográficamente determinados que inciden de manera definitiva en los lenguajes de Oscar: el Caribe, Europa y Nueva York.
En la exposición se exhiben unos 50 vestidos. ¿Cómo se identificaron y seleccionaron? ¿Bajo cuáles criterios? ¿Algunos nombres de a quiénes Oscar de la Renta les creó esas piezas? Joel Butler: Además del inmenso apoyo del Archivo Oscar de la Renta, que ha prestado una muestra retrospectiva de vestidos y accesorios de la marca, en esta ocasión contamos con préstamos provenientes de las colecciones de personalidades internacionales como Hillary Rodham Clinton, Laura Bush, Barbara Pierce Bush, Sarah Jessica Parker, Oprah Winfrey y Taylor Swift. A estas se suman figuras importantes de la sociedad dominicana que tuvieron relaciones estrechas con el diseñador como es el caso de varios trajes prestados por la familia Rainieri y la familia Vicini.
El discurso museográfico es la manera de integrar y armonizar diferentes recursos para construir una lectura coherente y amena de la exposición. ¿Cómo la museografía construyó este discurso?, ¿dónde están los acentos? ¿Qué recursos se utilizaron? Leticia Moronta: El discurso museográfico se construyó a partir de los resultados de la investigación curatorial y del trabajo directo con los curadores a partir de ciertos elementos simbólicos como por ejemplo la O de Oscar. El uso de los colores, aunque a veces puedan parecer imperceptibles, suma niveles de lectura a los visitantes. Cada momento espacial se diseñó a partir de la organicidad y circularidad de la forma de la letra O, tomando en cuenta que los flujos de los recorridos y la circulación de los visitantes fueran apropiados para los públicos que nos visitan.
¿Cuáles fueron los principales desafíos desde la museografía en este proyecto? Leticia Moronta: Los desafíos que presentó el proceso de diseño y construcción de los elementos museográficos fueron varios. Por un lado, el hecho de trabajar dentro un medio sobre el que no conocíamos a profundidad sus implicaciones y requisitos. Es decir, trabajar moda y textiles, que en términos de conservación, de construcción y montaje tiene requerimientos distintos a las obras de arte con las que acostumbramos trabajar. La temperatura, humedad y la iluminación llevan un manejo muy específico. Por otro lado, en este proyecto contamos con una mayor variedad de equipos de especialistas en una diversidad de disciplinas y el reto ha sido coordinar y trabajar con todos a las vez para lograr una actividad armoniosa, en la que cada uno se enriquezca del otro logrando un producto impecable, como el que podemos presentar hoy. Ser el medio interpretativo, a nivel espacial, de los requerimientos de los curadores y cumplir con los requerimientos de la institución, mientras se trabaja de acuerdo a las posibilidades que permitía el espacio es uno de los retos más grandes. Encontrar ese equilibrio en donde convergen y funcionan todas las partes de un todo.
Be Oscar de la Renta: Centro León, Santiago de Los Caballeros | From November 22, 2019
Santiago de los Caballeros.- Oscar de la Renta has been studied frequently from an international perspective. On this occasion, the Eduardo León Jimenes Foundation, Centro León and Grupo Puntacana present the life and work of an artist out of series, of a versatile creator, of a universal Dominican who always kept his native country in his mind and in his generous heart. The dream begins when, running the summer of 2012, María Amalia León de Jorge and Rosanna Rivera met Oscar in New York City, and together they begin to weave the idea of the exhibition from the visions that the designer himself I had the same. In 2015 the initiative is resumed at the beginning of curatorial research with the enthusiastic impulse of the Rainieri family and, especially, of the Oscar de la Renta family.
The exhibition is a perspective of his figure, seen from the Dominican Republic, his native culture, identifying the various connections of his Caribbean roots with other territories that the designer was braiding throughout his life and career. In this exhibition project, the link between the national and the universal, the Dominican and the Caribbean is shown in the designer's work, resulting in an unprecedented and unique contribution to the exhibition landscape, both national and international. The spaces of the cultural institution invite a journey through the trajectory, creativity and influence of this world-famous creator, based on a museographic account that contains the foundations of an exceptional personality, full of art, rigor and tenderness.
This exhibition project, framed in the Great Teachers program, which the León Center has been developing since its inception, has also had the material and moral support of leading companies interested in the promotion of art and culture. Grupo Puntacana, Cervecería Dominicana Dominicana, Citi Private Bank, Banco Popular Dominicano, Editora Listín Diario, Visa International, Cibao International Airport, Synergies Corporation, Propagás Foundation and Excel, are the sponsors.
What is exhibited today in the room is the result of a process of several years of work, what were the stages of this project? Joel Butler: The idea of holding this exhibition germinated with an Oscar de la Renta visit to the León Center in 2009, when Fernando Peña Defilló, the eternal return, was presented. And it began to take shape after a visit from our director María Amalia León de Jorge to Oscar in the same year. In 2015 the research process was formally initiated in which the collections, bibliographic and documentary collections were identified from which this exhibition was conceptualized, which also shows a long and intense work in the world of fashion, work as ambassador of the Dominican culture that he attributed to himself, as well as his human and humanitarian side. Once the costumes, works, documents and objects necessary to narrate the history of the exhibition have been identified, the process of contacting private institutions and collectors and coordinating transport agreements and logistics to the León Center begins. After the arrival of all objects to the deposit of cultural goods of the León Center, the process of installation of the costumes and accessories has been in charge of Molly Sorkin and Jennifer Park, specialists of the Oscar de la Renta Archive and curators experts in fashion and textiles. The museological design and assembly of the exhibition has been in charge of the team of specialists of the León Center, led by our museologist Leticia Moronta with advice from Donovan & Green and Martín Corullon.
How was the research process for the exhibition project? What documentary funds were studied? What people provided information or provided items and how are these contributions reflected in the room? Joel Butler: As part of the research, more than 50 interviews were conducted that included family members, fellow students and friends of the designer's adolescence. We also have the testimonies of national and international personalities who were clients and friends of Oscar de la Renta, to which those of people who worked alongside him both in fashion and in his other projects. During the research process, several trips were made to study in detail the funds of institutions such as the Savanah College of Arts and Design, Kent State University Museum and the department of special collections of the Fashion Institute of Technology, as well as other collections that were consulted by digital channels such as the collection of the Anna Wintour Costume Institute, the Costume Museum of Madrid, among others.
The name of the exhibition is BE OSCAR DE LA RENTA, why "BE" in infinitive? Sara Hermann: One of the most difficult tasks is to start something. And an exhibition is quite complex to name, and if we add to that the complexity of it, I recognize that it has been an intense work of a work team. As Oscar said, the creative process is teamwork. Thus, we consider being Oscar de la Renta. Being is the most general of terms. In verb and in infinitive it implies more than the material presence of a person, it raises a spiritual presence. To be Oscar de la Renta is to be human, to be Dominican, to be transnational, to be integral, to be familiar, to be a friend.
It can be said that the work of the curatorship is to achieve an intermediation between an artist and his work with the public. On this occasion, how does the curatorial team manage to establish this communicational bridge between the life and work of Oscar de la Renta and the public? Sara Hermann: This exhibition project proposes a journey through the life, work and influence of Oscar de la Renta, a visual and spatial story that takes visitors from the widely known, to more intimate spaces and moments. For the curatorial team it was very important to carry out this project in the Dominican Republic to present a differentiated view of the Oscar de la Renta figure studied from his homeland and identifying the various connections with other territories that the designer was braiding along His life and career. The communication bridges from these dimensions of Oscar and the public were established based on a thorough investigation. The research process of any exhibition project involves a series of complexities, varied levels of substance, involves time and specialists who focus on this task. Being Oscar de la Renta has not been different, although he has had a series of specificities related to the issues we are dealing with.
What were the main elements that defined the curation of this exhibition? Sara Hermann: Fashion, as a discursive element, as a cultural component, is a rich topic and with possibilities to address it in various ways, it is in turn a very particular research quarry. And if to that fact the plurality of the Oscar de la Renta character is added, then as a consequence, there are also multiple investigative dimensions that we had to address. Also, this research process involves a work team. It is a collective effort that has developed in different places and times. The sources have been varied, museums, academic institutions, archives. The team has included people from different backgrounds and backgrounds, and has encompassed many wills. Questions that perhaps we had not asked before, have played a fundamental role: What does the design process imply? What is it designed for? What skills or abilities come into play when designing? How does design articulate notions of identity, culture, being and ways of life?
The tour of the exhibition is done through five spatial moments or areas, what are they and how do they articulate with each other? Yina Jiménez: The different dimensions of Oscar de la Renta can be seen in the exhibition through five spatial moments that summarize and articulate his future as a human being and as a professional of the arts. The space moment category comprises, in a compound concept, the idea of time and space. It is a nucleus of meaning that presents chronological episodes (not necessarily linear) and re-semantizes the idea of space by relating the site of the exhibition to the place to which it refers. The five moments are: Oscar manifest; Oscar Renta Fiallo is Oscar de la Renta; In the workshop everything is inspiration; I'm just an island boy: Oscar is transnational; and Essences of a legacy: Be Oscar de la Renta. The spatial moments are articulated between them through the workshop, whose perimeter walls emphasize three geographically determined axes that definitely affect Oscar's languages: the Caribbean, Europe and New York.
The exhibition shows about 50 dresses. How were they identified and selected? Under what criteria? Some names of whom Oscar de la Renta created these pieces? Joel Butler: In addition to the immense support of the Oscar de la Renta Archive, which has provided a retrospective sample of the brand's dresses and accessories, this time we have loans from the collections of international personalities such as Hillary Rodham Clinton, Laura Bush, Barbara Pierce Bush, Sarah Jessica Parker, Oprah Winfrey and Taylor Swift. To these are added important figures of Dominican society who had close relationships with the designer such as several costumes provided by the Rainieri family and the Vicini family.
Museographic discourse is the way to integrate and harmonize different resources to build a coherent and enjoyable reading of the exhibition. How did the museology build this discourse? Where are the accents? What resources were used? Leticia Moronta: The museological discourse was built on the results of curatorial research and direct work with curators based on certain symbolic elements such as Oscar's O. The use of colors, although sometimes they may seem imperceptible, adds reading levels to visitors. Each space moment was designed based on the organicity and circularity of the shape of the letter O, taking into account that the flows of the routes and the circulation of the visitors were appropriate for the public that visit us.
What were the main challenges from the museography in this project? Leticia Moronta: The challenges presented by the design and construction of the museum elements were several. On the one hand, the fact of working within a medium on which we did not know in depth its implications and requirements. That is, working fashion and textiles, which in terms of conservation, construction and assembly has different requirements to the works of art with which we usually work. The temperature, humidity and lighting have a very specific handling. On the other hand, in this project we have a greater variety of teams of specialists in a variety of disciplines and the challenge has been to coordinate and work with everyone at the same time to achieve a harmonious activity, in which each one gets rich from the other achieving an impeccable product, like the one we can present today. Being the interpretive medium, at the spatial level, of the requirements of the curators and complying with the requirements of the institution, while working according to the possibilities that the space allowed is one of the biggest challenges. Find that balance where all parts of a whole converge and work.