Arte Berri / Galería de arte
La Calle Hostos # 105, Zona Colonial, Santo Domingo, República Dominicana
Esta exposición se presenta en el marco de las actividades de lanzamiento del libro, Amaya Poesía Visual, de la autoría de Gamal Michelén y Yolanda Wood. Esta muestra reúne una selección de obras recientes de la destacada artista, Amaya Salazar, ofreciendo una mirada a las distintas técnicas y dimensiones de su evolución conceptual.
OCA|News Amaya Salazar / Arte Berry / Noviembre, 2024 / Internacional / Nacional
La individual presenta dibujos de Amaya que son fundamental en su obra ya que son el inicio de cada una ellas. Son trazos libres donde la línea danza sobre el papel mantequilla hasta encontrar las distintas formas que luego se convertirán en un cuadro, en un relieve o en una escultura. En adición estos trabajos en carboncillo se convierten en una mirada íntima al estudio de la artista, la sutiliza del papel convive con esos rotos, parches o manchas donde una vez estuvo la mano de la artista iniciando una de sus muchas creaciones.
Se pueden observar siete cuadros donde Amaya incorpora sus reconocidas figuras humanas y paisajes que se bañan con nuevas luces, colores y elementos. La pintura titulada “Azul” así como lo expresa su título es monocromática, pero en este el dominio de la materia y la forma es evidente ya que se pueden observar distintas tonalidades de este color. Amaya es tan atrevida que en el centro de la obra deja la tela expuesta porque sí, porque puede, porque hace sentido en este cuadro. En esta obra como en “Infinito” el círculo forma parte de la composición. Este es un símbolo de la eternidad, de la fecundidad, del ciclo infinito, del principio y del fin. Este elemento no es solo un recurso formal, sino una manifestación de su búsqueda filosófica y estética, añadiendo nuevas capas de significado a su obra.
Este círculo que se manifestó por primera vez en la exposición de esculturas monumentales en el Centro León también está presente en dos de las cuatro esculturas que presenta en esta exposición. Trabajadas en materiales diversos como resinas, hierro, espejos y metacrilato, las piezas conjugan formas orgánicas y geométricas en un diálogo armónico. Las palmas, por ejemplo, representan la conexión con lo natural, mientras sus bases geométricas abstraen y reinterpretan estas formas, logrando un balance impecable entre lo orgánico y lo racional. En la obra titulada Reflejo, este equilibrio se hace evidente: la palma encuentra su dualidad en líneas paralelas, evocando la simbiosis entre la naturaleza y la abstracción que ha caracterizado el trabajo de Amaya desde su exposición en el Museo de Arte Moderno en 2021.
Los relieves narran, a su vez, la búsqueda incansable de Amaya por expandir los límites de su lenguaje visual. Estas piezas, cargadas de color, luz y textura, invitan al espectador a adentrarse en un relato visual que no impone respuestas, sino que suscita preguntas. Aquí es donde la frase de Gamal Michelén cobra relevancia: “El espectador trae su historia a la obra.” Estas obras no son narrativas cerradas, sino espacios abiertos donde las formas y los colores se convierten en vehículos para la meditación y la interpretación personal.
Finalmente, esta exposición no solo celebra la obra de Amaya Salazar, sino también la reapertura del Centro Cultural Amaya, un espacio que promete convertirse en un epicentro de actividad cultural y artística. Con esta exposición, el centro no solo se consolida como un lugar para la contemplación del arte, sino también como un catalizador de nuevas ideas y encuentros creativos.
Bingene Armenteros
Curadora y Crítico de Arte
Amaya Salazar "Amaya Visual Poetry" / Solo Exhibition / Book Launch
This exhibition is presented within the framework of the launch activities of the book, Amaya Poesía Visual, by Gamal Michelén and Yolanda Wood. This exhibition brings together a selection of recent works by the outstanding artist, Amaya Salazar, offering a look at the different techniques and dimensions of her conceptual evolution.
The solo exhibition presents drawings by Amaya that are fundamental to her work since they are the beginning of each one of them. They are free strokes where the line dances on the butter paper until it finds the different forms that will later become a painting, a relief or a sculpture. In addition, these charcoal works become an intimate look at the artist's studio, the subtlety of the paper coexists with those tears, patches or stains where the artist's hand once was initiating one of her many creations.
Seven paintings can be seen where Amaya incorporates her well-known human figures and landscapes that are bathed in new lights, colors and elements. The painting titled “Azul” is monochromatic, as expressed in its title, but in this one the mastery of matter and form is evident, as different shades of this color can be observed. Amaya is so daring that in the center of the work she leaves the canvas exposed because yes, because she can, because it makes sense in this painting. In this work, as in “Infinito,” the circle is part of the composition. This is a symbol of eternity, of fertility, of the infinite cycle, of the beginning and the end. This element is not only a formal resource, but a manifestation of her philosophical and aesthetic search, adding new layers of meaning to her work.
This circle, which was first manifested in the exhibition of monumental sculptures at the Centro León, is also present in two of the four sculptures presented in this exhibition. Worked in diverse materials such as resins, iron, mirrors and methacrylate, the pieces combine organic and geometric forms in a harmonious dialogue. The palms, for example, represent the connection with nature, while their geometric bases abstract and reinterpret these forms, achieving an impeccable balance between the organic and the rational. In the work entitled Reflection, this balance becomes evident: the palm finds its duality in parallel lines, evoking the symbiosis between nature and abstraction that has characterized Amaya's work since her exhibition at the Museum of Modern Art in 2021.
The reliefs narrate, in turn, Amaya's tireless search to expand the limits of her visual language. These pieces, loaded with color, light and texture, invite the viewer to delve into a visual story that does not impose answers, but rather raises questions. This is where Gamal Michelén's phrase becomes relevant: "The viewer brings his story to the work." These works are not closed narratives, but open spaces where shapes and colors become vehicles for meditation and personal interpretation.
Finally, this exhibition not only celebrates the work of Amaya Salazar, but also the reopening of the Amaya Cultural Center, a space that promises to become an epicenter of cultural and artistic activity. With this exhibition, the center not only consolidates itself as a place for the contemplation of art, but also as a catalyst for new ideas and creative encounters.
Bingene Armenteros
Curator and Art Critic
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